El champiñón blanco es un alimento muy rico en minerales, de los cuales cabe destacar el selenio, que posee un elevado poder antioxidante. También contiene potasio, que resulta ser un buen diurético, evitando así la retención de líquidos, y por último, destacar el fósforo, muy importante en la conservación de nuestros huesos y en la actividad del sistema nervioso. Al tener un elevado porcentaje de agua (90%), resulta ser un alimento ideal para las dietas de adelgazamiento, ya que su consumo aporta un bajo nivel calórico.
El champiñón es un alimento muy versátil, con el que nunca te quedarás sin ideas de cómo prepararlo. Es perfecto para acompañar carnes (salteándolo unos minutos con sal, pimienta y perejil) y también para adornar tus arroces y platos de pasta.