En verano, la mejor de todas las ciruelas es la Reina Claudia, inconfundible por su color verde.
Esta ciruela verde se distingue también por ser menos ácida que otras variedades como la ciruela amarilla, y es más pequeña, carnosa. Esto la convierte en un pequeño gran placer de verano. Es protagonista, por ejemplo, de ricos postres como los bizcochos, tartas de queso o base de buenas mermeladas, porque sobretodo es una fruta con un aroma e intenso sabor dulzón. Solo están disponibles durante la temporada de verano (meses de julio y agosto) y se suelen servir recién recolectadas, con lo que siempre estarán en su ideal punto de madurez.
Su bajo aporte calórico (unas 33 calorías por ciruela) hacen de esta rica ciruela verde el complemento idóneo de todo tipo de dietas. Porque contiene una alta cantidad de fibra, de vitaminas y minerales como el fósforo, hierro, magnesio, zinc, sodio, etc. Entre varias de sus cualidades nutricionales se encuentra la regulación del tránsito intestinal, la prevención de enfermedades cardiovasculares, el Alzheimer y la hipertensión. Además, favorecen la visión, depuran el hígado y combaten la anemia gracias a la vitamina C y su alto contenido en hierro.
Descubre nuestras diferentes variedades de ciruelas.